jueves, 20 de octubre de 2016

Supino


En el cruce de dos calles cualquiera

Una tarde gris de primavera

Abrazado a una nube pasajera lloró

Por impotencia o vaya a saber porque

Parado en una esquina repleta de gente

A solas se quedó preguntando al cielo

Una y mil veces que es lo que le pasa ¿?

No supo que responderse

Por vergüenza descubrió el rostro

Que ocultaban sus manos

Pensando que alrededor alguien estaba

Mirando preocupado

Pero nadie se paró siquiera a saciar su curiosidad

Que les iba a decir ¿? Si solo él sabe que tiene

A quien le puede importar su ser

Si nunca a nadie le importó

Se repuso rápidamente

Puso primera y arrancó

Con la lluvia intensa detrás

Apurándolo haciéndole luces

Ojos secos de lágrimas

De tanto en tanto repasa

Su rostro en el espejo retrovisor

Quiere llegar a su casa

A ver si puede cambiar el rumbo

Pero solo encuentra las ofertas

Que le ofrece su soledad…

No hay comentarios.:

Publicar un comentario